…no penséis que ser escritor es sólo una profesión más con otro conjunto de redes que dominar, otra escalera a la que subir, otro conjunto de personas mayores bien instaladas a las que impresionar. Puesto que nadie podrá decoros qué escribir ni cómo, estáis autorizados a tener vuestra propia visión, pero vuestra vida ha de tener el valor suficiente para volcarla en palabras de la mejor manera posible.
Flores en las grietas, Richar Ford (Anagrama, 2012)
Me cae bien Richard Ford. No le conozco personalmente; lo más cerca que he estado de él es ahora mismo, que acabo de reencontrarme su Flores en las grietas enterrado en el montón de libros por reseñar. Esta costumbre mía de subrayar y doblar las páginas, alguna vez, tenía que dar fruto. También funciona lo de guardar las tarjetas con las anotaciones. Te ayuda a recordar. Miro la fecha de edición: junio de 2012. Reviso las notas y enseguida encuentro una que me hace sonreír. Me cae bien este tío. Página 10: “En muchos lugares de Estados Unidos, los verdaderos dueños del poder preferirían que poseyerais y utilizarais un Mac-10 antes que El guardián entre el centeno.” El Mac-10 es un subfusil; yo también tuve que mirarlo en internet.
Flores en las grietas, que lleva el subtítulo de “Autobiografía y literatura”, reúne varios ensayos y textos biográficos de Richard Ford, escritor estadounidense, experto y deudor de Chéjov, que reflexiona sobre la vida, el sentido de la escritura y comparte con nosotros, sus lectores, sus opiniones sobre otros escritores como Carver o Yates.
Sí, ustedes los escritores son así. Guapos, vanidosos, destroza-versos, egocéntricos… pero yo te leo porque me caes bien 😉
Qué caña metes en el párrafo final, y qué verdad, alguien tenía que decirlo.
Me alegra que te haya gustado.
Seguimos,