Con la llegada del nuevo mes el tiempo se hizo más templado. El despido de funcionarios relacionado con la inminente subida de los salarios, tema de especulación durante mucho tiempo, semejó de lado en los últimos días del mes que acababa.
Capítulo XXIII. La puerta. Natsume Soseki. Editorial Impedimenta, 2012
– ¿Me pone un clásico japonés para llevar?
– ¿Un clásico japonés? ¿Qué es eso?
– No sé. Acabo de verlo en su carta.
– Debe estar confundido.
– Yo no estoy confundido. Sé perfectamente de lo que hablo. ¿Aquí que pone?
– La puerta, Natsume Sōseki, obra maestra de la literatura japonesa del XX, y tercera parte de la trilogía inaugurada con Sanshiro y Daisuke.
– Lo quiero para llevar. Me abre la pechuga por la mitad y me gustaría llevarme la cabeza y la espina para hacer caldo.
– Un caldo en esta época viene muy bien; dicen que evita el mal de ojo.
– ¿Me está llamando usted catacaldos? Yo sólo quería hacer gasto y, tal y como están las cosas, debería hacerme una reverencia.
– Yo no admito referencias. ¿Sabe usted leer?